Quito, 04 ago (La Calle).- A cuatro semanas del inicio del estiaje, el Ejecutivo anunció un nuevo proceso para alquilar energía flotante, luego de declarar desierto el concurso de 260 megavatios para turbinas en Pascuales.
La vocera gubernamental Carolina Jaramillo confirmó este lunes que, tras la declaratoria de desierto del proceso liderado por Celec para alquilar 260 megavatios de turbinas termoeléctricas, se activará «inmediatamente» un plan de alquiler de energía flotante por 230 megavatios. El anuncio llega en un contexto crítico: desde septiembre, Ecuador enfrentará el estiaje, período de sequía que reduce el caudal de ríos y limita la generación hidroeléctrica, fuente del 90% de la matriz nacional.
Antecedentes
Según Jaramillo, todas las ofertas para las turbinas fueron no pasaron los filtros por incumplir requisitos, revelando fallas en la planificación energética. La solución ahora planteada —barcazas— ya fue implementada en 2023 con resultados cuestionables: tres plantas flotantes de la turca Karpowership costaron USD 250 millones, pero los apagones alcanzaron 14 horas diarias. Además, en septiembre de 2024, una de estas barcazas redujo su producción a 12 MW por fallas logísticas en el suministro de combustible, evidenciando vulnerabilidades operativas.
En julio de 2024, una investigación de Primicias reveló que la barcaza Emre Bey zarpó de Turquía días antes de que Celec lanzara su licitación, mientras una denuncia por presunto tráfico de influencias envolvía al entonces ministro Roberto Luque y al gerente de Celec. Pese a ello, el Gobierno insistió en el modelo de emergencia, amparado en la declaratoria de excepción de abril de 2024.